Una vez más parece que Facebook quiere conquistar un sector adicional del desarrollo web. No ha sido suficiente para el gigante de Sillicon Valley apoderarse de la oportunidad que les puso Google de frente al crear y popularizar React, así como crear su propia alternativa al Node Package Manager con Yarn, sino que al parecer quieren tomar parte en todos los aspectos del stack de las aplicaciones web modernas.
Como bien sabes, una de las partes mas importantes de cualquier proyecto es la base de datos y el cómo tu aplicación interactúa con ella. Ya desde hace varios años, si decides crear y usar una API, la respuesta era obvia: tiene que ser una REST API. La mayoría de los developers nos sentimos cómodos utilizando APIs tipo REST ya que sirven y seguirán sirviendo eficientemente nuestras necesidades, de hecho, seria correcto el decir que las APIs tipo REST son el estándar de oro en el mundo del desarrollo web moderno.
Pero lo que seguramente diremos en el futuro, es que hay un nuevo contendiente dentro del ecosistema. Estoy hablando, como podrás adivinar, de GraphQL.
GraphQL no es otra cosa mas que un lenguaje de consulta relacional que es agnóstico al tipo de base de datos o método de almacenamiento que utilices.
La segunda parte de mi definición es lo que ha atraído la atención de muchos developers y es el motivo por el cual GraphQL esta rápidamente ganando adeptos dentro de la comunidad del desarrollo web. También cabe mencionar el hecho de que GraphQL es relativamente fácil de usar y los servicios que puedes crear con el prácticamente se leen como Inglés común y corriente.
En otras palabras, GraphQL es altamente intuitivo.
La otra cara de esta moneda tiene que ver con algo bastante nuevo dentro de la industria y es el hecho de que no todo mundo se siente cómodo utilizando mas y mas herramientas creadas y respaldadas por una misma compañía. No se diga considerando que estamos hablando de Facebook.
Ha habido controversias con otras tecnologías provenientes de Facebook. Si bien Yarn se ha convertido en un serio competidor a NPM a escasos 5 años de que fue anunciado en Octubre del 2016, hay ciertos developers que encontraron que las primeras versiones de esta tecnología enviaba información de las aplicaciones que la utilizaban a los servidores de Facebook sin el consentimiento previo del developer.
Ese problema fue arreglado al poco tiempo de ser descubierto, pero no es la primera ni la última controversia que una tecnología proveniente de Facebook va a levantar.
Si no tienes una opinión del todo favorable en cuanto a Facebook y sus prácticas con la información de sus usuarios -como yo, por ejemplo- nadie te va a culpar si te reúsas a utilizar React, Jest, GraphQL, Yarn o cualquier otra tecnología proveniente de dicha compañía.
Pero los hechos están claros, Facebook quiere seguir avanzando su aventura dentro del mundo open source y quiere estar envuelto